Caída capilar: todo lo que necesitas saber

En otoño suele traer consigo un aumento de las consultas en la oficina de farmacia acerca de la caída capilar. 

En este artículo te contamos más sobre este fenómeno. Hablaremos de las distintas fases de crecimiento capilar, los distintos tipos de caída capilar que existen, seguiremos con una lista de consejos para tratar de reducir la caída capilar y, para acabar, os contaremos más sobre los activos más utilizados en los complementos alimenticios contra la caída capilar.

¡Espero que os guste!

 ¿Sabes que cada día perdemos, de forma natural, una media de 100 cabellos?
Cada cabello crece a partir de un folículo piloso y pasa por 3 etapas diferentes, con una duración total de entre 2 a 7 años. Estas fases son:
- Crecimiento capilar o fase anágena. El cabello crece a partir del folículo piloso.
- Cese de crecimiento o fase catágena. El cabello deja de crecer pero se mantiene unido al cuero cabelludo durante 2-3 semanas.
- Caída o fase telógena. Finalmente, el cabello cae. Suele ser alarmante ya que es una caída repentina y en gran cantidad.

En cuanto a los tipos de caída capilar, podemos destacar 3, que son los que se ven con mayor frecuencia desde la farmacia comunitaria.

• Efluvio telógeno o caída estacional. Se trata de una caída difusa y reversible, producida por diversos factores:
            - Déficit nutricional. Una dieta sana y equilibrada, rica en vitaminas y minerales, es vital para mantener una buena salud a nivel general. Si comemos bien nuestro cuerpo lo nota, y nuestro cabello también. Por ello, como mencionaremos más adelante, es importante evitar el consumo de ultraprocesados, alcohol y tabaco. Asimismo, es importantísimo realizar ejercicio físico diariamente. 
            - Post enfermedades. De hecho, se ha visto que en muchos casos, pasar el Covid-19 produce este tipo de caída capilar, debido a una disfunción del folículo piloso.
            - Estrés emocional. De todos es sabido que el estrés, si es excesivo, acarrea varios problemas, uno de los cuales es la caída capilar. Por ello, y como veremos más adelante, es importante reconocer las diversas situaciones que nos generan un estrés mayor de lo normal e intentar evitarlas.
            - Cambio estacional. El paso del verano al otoño, y del invierno a la primavera también parece afectar a la caída capilar.
• Alopecia andrógenica. Es una caída del cabello lenta y progresiva poducida por factores genéticos y hormonales.
  La testosterona, mediante la enzima 5-alfa-reductasa, es metabolizada a su metabolito activo, la dihidrotestosterona (DHT), la cual estimula los receptores androgénicos presentes en el folículo piloso, provocando una miniaturización del mismo. Conforme van pasando los ciclos capilares, el cabello crece menos, hasta que finalmente deja de crecer. Se produce una disminución de la densidad capilar que se hace cada vez más notable. En estos casos, es importante acudir al dermatólogo para que establezca un buen diagnóstico y paute un tratamiento adecuado en función del grado de patología.
• Alopecia areata. Se trata de una enfermedad que provoca pérdida capilar en zonas pequeñas y redondeadas del cuero cabelludo. Se desconoce la causa exacta pero se piensa que puede deberse a un mecanismo autoinmune. De este modo, aparecen en el cuero cabelludo zonas pequeñas en las cuales el cabello no crece. Al igual que en el caso anterior, es importante acudir al dermatólogo para obtener un buen diagnóstico. 

Vistos los tipos más comunes de caída capilar, podemos deducir que es muy importante saber a qué tipo de problema nos enfrentamos. Para ello, vuelvo a repetir, es muy importante acudir a un dermatólogo para que establezca un diagnóstico adecuado y el tratamiento que mejor se ajuste.
Desde la oficina de farmacia os puedo dar una serie de consejos para tratar de evitar, o en todo caso reducir la caída capilar. 
1. Lo más importante es la realización de un diagnóstico precoz y profesional para establecer el mejor tratamiento posible.
2. Lava tu cabello cuantas veces necesites, utilizando champús y acondicionadores suaves sin sustancias agresivas.
3. Descansa lo suficiente, entre 6 y 8 horas diarias.
4. Detecta y trata de evitar los factores que te causen estrés, ya que el estrés es una de las principales causas de caída del cabello.
5. Sigue una dieta sana y equilibrada, y realiza ejercicio físico diario.
6. Evita el consumo de alcohol y tabaco.
7. En caso necesario, puedes recurrir a suplementos de vitaminas y minerales específicos para fortalecer el cabello.
8. No maltrates tu cabello con secadores o planchas y tintes... ya que pueden afectar a la integridad del cabello y hacerlo más quebradizo.
9. Evita coletas o moños muy tirantes, ya que pueden producir lo que se conoce como alopecia de tracción.

Finalmente, me gustaría comentaros los distintos activos que contienen los suplementos destinados a fortalecer el cabello. Encontramos activos naturales con actividad antiandrogénica, vitaminas, minerales y aminoácidos. 

En cuanto a los activos naturales con actividad antiandrogénica, destaca el extracto de Serenoa repens y el extracto de Cucurbita pepo (semillas de calabaza). La actividad principal de ambos es la inhibición de la enzima 5-alfa-reductasa, que se encarga de convertir la testosterona en dihidrotestosterona ¿Os acordáis? Bueno, pues gracias a estos dos activos se consigue evitar la miniaturización del folículo piloso. Además, el extracto de Cucurbita pepo, gracias a su contenido en ácidos grasos omega-6 y omega-9 aumenta la densidad capilar. 

Por otro lado, entre las vitaminas encontramos a la famosa Biotina, "la vitamina del cabello", también conocida como vitamina B7, B8 o H. Este activo, presente en la gran mayoría de suplementos destinados a fortalecer el cabello, favorece su crecimiento, reduce su rotura y genera mayor elasticidad. También encontramos a las vitaminas C y E, cuya acción antioxidante protege al cabello frente al estrés oxidativo. 

En cuanto a minerales, destacaré el Zinc y el Selenio. El primero restaura el folículo piloso y estimula su crecimiento, mientras que el Selenio ejerce un efecto antioxidante.

Finalmente, en cuanto a los aminoácidos, cabe mencionar la L-cistina y la metionina. Ambos se encuentran en la queratina, una proteína presente en cabello y uñas ejerciendo una función de protección frente a diversos agentes externos. Por ello, ambos aminoácidos favorecen el crecimiento del cabello. Por su parte, L-Cistina también estimula la producción de colágeno. Hablaré también de la L-arginina, otro aminoácido cuya función se basa en estimular el flujo sanguíneo, lo cual favorece el crecimiento capilar.

Y con esto llegamos al final de este primer artículo, espero que os haya gustado. ¡Muchas gracias por vuestra atención!